Empezar yoga como un pasatiempo puede ser una excelente manera de mejorar su bienestar físico y mental. Fortalece tu núcleo y proporciona claridad mental.
Recuerde que comenzar algo nuevo lleva tiempo, sea amable consigo mismo y disfrute el viaje de descubrir lo que funciona para usted. El yoga no es una práctica única para todos, es una práctica personal y en constante evolución.
El yoga es una forma de ejercicio que involucra una amplia variedad de grupos musculares, según la postura específica o el flujo que se practique.
Músculos centrales: las posturas de yoga, como la tabla, la tabla lateral y la postura del bote, trabajan los músculos centrales, incluidos el recto abdominal (abdominales), los oblicuos y el transverso abdominal.
Músculos de la espalda: las posturas de yoga, como la postura del perro boca abajo, la cobra y la langosta, trabajan los músculos de la espalda.
Músculos de los hombros y los brazos: las posturas de yoga como la tabla, el perro boca abajo y la postura del cuervo trabajan los músculos de los hombros y los brazos, incluidos los deltoides, los tríceps y los bíceps.
Músculos de las piernas: las posturas de yoga como el guerrero I, el guerrero II y la postura de la silla trabajan los músculos de las piernas, incluidos los cuádriceps, los isquiotibiales y los músculos de la pantorrilla.
Músculos de los glúteos: las posturas de yoga como el guerrero I, el guerrero II y la postura de la silla también trabajan los músculos de los glúteos, a veces conocidos como los músculos de las nalgas.
También vale la pena señalar que el yoga también puede ayudar a mejorar la flexibilidad y el equilibrio, y muchas prácticas de respiración y atención plena también pueden ayudarlo a mejorar su enfoque, la conexión mente-cuerpo y el bienestar mental.
El yoga generalmente se considera una forma segura de ejercicio, pero como cualquier actividad física, existe el riesgo de lesiones. Algunas de las lesiones más comunes en el yoga incluyen:
Esguinces y distensiones: estos tipos de lesiones a menudo ocurren en la muñeca, la rodilla o el tobillo y generalmente son causados por un estiramiento excesivo o una alineación incorrecta.
Dolor en la parte inferior de la espalda: esta es una queja común entre las personas que practican yoga y puede ser causada por una variedad de factores, que incluyen tensión en las caderas y los isquiotibiales, músculos centrales débiles y mala postura.
Lesiones en los hombros: los hombros son vulnerables a las lesiones en el yoga debido a su complejidad y al hecho de que están involucrados en muchas poses. Las lesiones comunes del hombro incluyen distensiones y pinzamientos del manguito rotador.
Dolor de cuello: esto puede ser causado por una alineación incorrecta en poses como el perro boca abajo y la postura del camello.
Lesiones de rodilla: pueden ocurrir debido al uso excesivo, alineación incorrecta o cuádriceps débiles.
Lesiones por hiperextensión: Ocurre cuando las articulaciones son empujadas más allá de su rango normal de movimiento. Este tipo de lesiones pueden ocurrir en los codos, el cuello y la espalda, especialmente durante las posturas que implican girar o doblarse hacia atrás.
Es importante recordar que el cuerpo de cada persona es diferente y puede tener diferentes limitaciones. Siempre es mejor escuchar a tu cuerpo y evitar esforzarte demasiado. Si experimenta dolor o incomodidad, detenga el movimiento e intente modificar la postura o usar accesorios para encontrar una variación más cómoda.
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