Al empezar a practicar yoga, la mayoría de nosotros necesitamos orientación sobre cómo realizar las posturas y los flujos correctamente. Esta es la razón principal por la que la mayoría de los principiantes deben comenzar su viaje de yoga en un estudio. Sin embargo, el yoga es más que una práctica física; es un viaje de autodescubrimiento y paz interior. Por lo tanto, la práctica de yoga en casa puede ser atractiva para aquellos que buscan privacidad en este viaje. En estos casos, es esencial crear un espacio dedicado al yoga en casa. Esta entrada del blog explorará cómo crear un espacio que nutra tu práctica de “yoga en casa” y te ayude a encontrar tu zen.
Encontrar el lugar adecuado
Tu espacio de yoga no tiene por qué ser grande, pero sí tranquilo. Busca un rincón tranquilo en tu casa donde no te molesten fácilmente. Puede ser una parte del salón, una habitación libre o incluso un lugar tranquilo en el balcón.
Equipo esencial
En el centro de tu espacio de yoga está tu esterilla. Elige una que ofrezca suficiente amortiguación y agarre. Otros elementos útiles son los bloques de yoga, las correas y un almohadón o cojines para mayor comodidad. Tenlos al alcance de la mano para integrarlos perfectamente en tu práctica. Busque todos los artículos esenciales en nuestra sección de Equipamiento de Yoga en esta página.
Crear ambiente
El ambiente de tu espacio de yoga es crucial. Considera la posibilidad de añadir elementos que atraigan tus sentidos y mejoren tu concentración. Una iluminación ambiental suave o unas velas pueden crear una atmósfera relajante. El incienso, los aceites esenciales o un difusor pueden añadir un aroma relajante. Para la paz auditiva, un pequeño altavoz o máquina de sonido que reproduzca música suave o sonidos de la naturaleza puede ser maravillosamente envolvente.
Toques personales
Tu espacio de yoga es único, así que personalízalo. Añade plantas para darle un toque de naturaleza y mejorar la calidad del aire. Cuelga obras de arte inspiradoras o afirmaciones donde puedas verlas. Un pequeño altar con objetos significativos como cristales, imágenes o estatuas puede servir como punto focal para la meditación.
Mantener el espacio despejado
Un espacio desordenado puede conducir a una mente desordenada. Mantén tu zona de yoga ordenada y organizada. Si el espacio es limitado, considera soluciones de almacenamiento como estanterías o cestas para guardar tu equipo de forma ordenada.
Respetar el espacio
Trata tu espacio de yoga con respeto. Acostúmbrate a entrar en él con la mente tranquila y abierta. Esto ayuda a establecer una fuerte asociación mental entre el espacio y tu práctica de yoga, mejorando la experiencia en general.
Tu espacio de yoga en casa es un santuario para tu cuerpo y tu mente. No tiene por qué ser perfecto ni lujoso, pero debe ser un lugar donde puedas desconectar del caos de la vida cotidiana y reconectar contigo mismo. Recuerda que la verdadera magia del yoga ocurre dentro de ti; el espacio sólo está ahí para apoyar ese viaje.
¡Feliz práctica!
